PRESENTAN PROYECTO PARA MODIFICAR LEY DE SEMILLAS
El viernes pasado se realizó una reunión en el salón “Hugo Heinzelbecker” del Consorcio Caminero N° 31 para analizar cuestiones vinculadas a un proyecto de modificación de la Ley de Semillas.
El proyecto para modificar es impulsado por el Diputado Nacional de Chaco, por La Libertad Avanza, Carlos Daniel García; se trata de la Ley N° 20247 (de Semillas y Creaciones Fitogenéticas) y fue presentado y compartido con referentes de La Libertad Avanza Las Breñas y Charata junto con profesionales de la ingeniería comprometidos en la elaboración del proyecto de la reforma de la actual ley de semillas.
Al respecto, en el ámbito de la reunión se explicó que “es importante mencionar que la actual ley data del año 1973, sancionada el 30 de marzo y publicada en Boletín Oficial el 16 de abril; a comienzos de los '90 llegan a la Argentina las semillas transgénicas y esto llevó a modificar en el año 1991 la reglamentación de la Ley de Semillas y Creaciones Fitogenéticas, y en el año 1995 la Ley de Patentes”.
Desde 2003 existen intentos para transformar la Ley de Semillas para brindar más certidumbre a las empresas semilleras en detrimento de derechos de los productores; en 2012 el gobierno nacional anunció que se estaba trabajando en una nueva Ley de Semillas para otorgar más derechos sobre la propiedad intelectual de la biotecnología agrícola. El debate se centró casi exclusivamente en un sólo punto: el derecho al uso propio de las semillas mediante el pago de una regalía que garantizara la continuidad de los proyectos de inversiones en desarrollos de nuevos materiales genéticos por parte de los semilleros. En 2016 se presentaron un par de proyectos para modificar la Ley, pero el tema todavía sigue abierto.
El diputado nacional Carlos Daniel García, indicó que, desde el espacio que lidera “pretendemos presentar un proyecto de modificación de la Ley de Semillas que contemple las producciones regionales como es nuestro algodón y las posibilidades de accesos a semillas que mejoren la productividad y, por ende, también la competitividad del productor algodonero. Desde nuestro lugar somos conscientes que si no gestionamos nosotros desde acá los cambios que favorezcan al sector de la producción algodonera no lo van a gestionar desde las zonas sojeras o cerealeras del país”.